sábado, 25 de marzo de 2017

Libro "Tras las huellas de León de Palleja"


En diciembre de 2015, con el patrocinio de la Asociación de Amigos del Batallón "Florida" de Infantería N°1 se publicó el libro Tras las huellas de León de Palleja: Arqueología en el sitio de la batalla de Boquerón del Sauce, prologado por el General de Ejército Guido Manini Ríos, Comandante en Jefe del Ejército Nacional.
A lo largo de sus 94 páginas, además de los antecedentes de la batalla de Boquerón del Sauce y de los resultados y conclusiones de la prospección arqueológica, se presenta un detallado e ilustrado estudio de los atributos metálicos (botones, distintivos y hebillas) de los uniformes utilizados por los cuatro ejércitos beligerantes en la Guerra de la Triple Alianza. Las fuentes principales de este análisis son los artefactos hallados en el área y exhibidos en los museos de sitio del Departamento del Ñeembucú, ubicado al suroeste de Paraguay, teatro principal de la Campaña de Humaitá o Campaña del Cuadrilátero (1866-1868).

El equipo de trabajo del
Proyecto arqueológico binacional Paraguay-Uruguay “Boquerón del Sauce”
en el ingreso del boquerón Norte. 
De izq. a der.: Sergio Ríos, Marcelo Díaz Buschiazzo, Ruth Alison Benítez, 
Diego M. Lascano, teniente coronel Wilfredo Paiva y coronel Roberto Velasco. 
(Foto por cortesía de László Erdélyi, diario El País)

Boquerón Norte, fotografiado 148 años después de la batalla por László Erdélyi. 

A continuación, imágenes de algunas de las tareas desarrolladas durante la prospección arqueológica y detalle de parte de la evidencia material hallada en el sitio.

Los ingredientes de este “guiso de porotos”, denominado así familiarmente por el corresponsal del diario El País, son 42 proyectiles esféricos de plomo sin impactar, calibres .67 y .71; nueve proyectiles cilindro-ojivales de plomo tipo Minié y otro similar tipo Enfield, calibres .53, .57, .59 y .61, de matrices distintas, seis de ellos impactados; dos pedernales de sílex para llave de chispa, y una cápsula fulminante 
para llave de percusión. 

Estos 55 artefactos, distribuidos en un área de apenas 40 centímetros de lado y a 60 metros de la trinchera, sintetizan en una superficie mínima el rango cronológico de la amplia variedad de armamento portátil utilizada durante la Guerra de la Triple Alianza, cuya fabricación va desde la segunda mitad del siglo XVIII hasta la década de 1860.
Entre las hipótesis acerca del origen de este material, se considera la posibilidad de que este conjunto tan diverso fuera transportado en un morral o bolsa de tela por un servidor de las tropas aliadas atacantes. Por otro lado, el portador podría haber sido un recolector paraguayo, encargado de recuperar el material bélico para su reutilización, que hubiera extraviado la carga en un momento diferente al del combate del 18 de julio de 1866. Los proyectiles del tipo Minié impactados podrían inclinar la balanza hacia esta última opción.

Soldado muerto junto a su morral en un detalle del cuadro
Ataque de la 3ª División del 2º Cuerpo de Ejército, de Francisco Fortuny.

Fragmentos de bomba de 68 libras y de granada sistema La Hitte 

Entre el material de artillería hallado en el sitio, se destaca el fragmento de una bomba de 68 libras, probablemente lanzada por los paraguayos, en la que puede observarse el oído y la anilla de sujeción para su transporte.
Por otro lado, es de remarcar un fragmento de granada sistema La Hitte, que aún conserva su tetón de plomo. Esta esquirla podría provenir de la artillería aliada, producto del fuego previo al asalto de la trinchera.

Hebilla M1845

Esta hebilla de bronce convexa, lisa, del tipo M1845, fue hallada entre una gran concentración de proyectiles. Las tropas de las Guardias Nacionales de Argentina y algunos integrantes del Batallón Florida utilizaban material del mismo tipo.

Bocavaina de bayoneta Enfield

Esta bocavaina o brocal de vaina de bayoneta triangular para fusil Enfield fue detectada a diez metros de la hebilla, lo que refuerza la idea sobre el considerable número de bajas aliadas en dicho sector. Es conocido que los paraguayos no utilizaban vainas para sus bayonetas. El coronel Palleja hizo una detallada descripción de esta particularidad: "No llevan vaina de bayoneta, esta se vuelve con la punta para abajo y se sujeta a la boca del cañón con un tiento".

Proyectiles del tipo Minié hallados en superficie 


Para adquirir el libro Tras las huellas de León de Palleja: 
Arqueología en el sitio de la batalla de Boquerón del Sauce
dirigirse a: 
battlefield.archaeo@gmail.com

1 comentario:

  1. Excelente trabajos amigos.
    Reciban un fuerte saludo departe de José Buslón y el Sello de la Historia Salto Uruguay

    ResponderEliminar